De lo personal a lo Colectivo
Por Tania Bustos
Para cualquier chilango es muy común pasar un rato en el maravilloso Centro de Coyoacán, ya sea con amigos, familia, ligues, o simplemente solo, y así como es típico pasar el rato en ese precioso sitio, también es bastante usual encontrar aquí todo tipo de bazares repletos de cositas artesanales y novedosas que no se hallan en centros comerciales.
Al andar de curiosos por los lugares cercanos al mero centro de esta alcaldía muy cerquita del Mercado Artesanal Mexicano, sobresale un pequeño callejón que lleva por nombre Belisario Domínguez, que mucha gente usa para tomar su camino de regreso a casa.
Al caminar por sus banquetas, llama la atención una tienda Panam y a un lado, un portón abierto, que hace que quieras entrar a echar un vistazo. Cuando entras, ¡bravo!, encuentras el genial y peculiar Colectivo Mercantil.
Un local visualmente bonito, lleno de muchísimas marcas mexicanas que tienen de todo, desde bolsas, macetas, cervezas, ropa, maquillaje, productos naturales, y ¡hasta dinosaurios!
​
Colectivo Mercantil es un conocido lugar en Coyoacán cuyos dueños comenzaron como muchos de los pequeños/medianos empresarios de las marcas que hoy albergan, pues con su marca Decostudio -la cual podemos encontrar en el Colectivo-, anduvieron de aquí para allá en bazares y demás sitios donde se pudieran dar a conocer.
Y bueno, ¿por qué no emprender un nuevo proyecto en donde ellos mismos como marca pudieran establecerse de forma fija, y al mismo tiempo, ayudar a otros para darse a conocer y crecer?
​
Colectivo Mercantil no sólo apoya a las marcas, también impulsa a aquellos jóvenes que están en busca de su primer empleo, brindándoles un lugar bastante ameno y lleno de aventuras para trabajar.
Aldo y Alexis son dos de los chicos que trabajan atendiendo el Colectivo, y dentro de sus experiencias laborando aquí, cuentan con todo tipo de anécdotas, desde presenciar el desmayo de una chica y usar uno de los mezcales exhibidos de una de las marcas para lograr que recobrara la consciencia nuevamente, hasta recibir una propuesta para una cita por parte de una clienta.
También han aprendido mucho de su participación en el Colectivo; por ejemplo, Aldo se ha enseñado a admirar el gran valor que hay dentro de la producción mexicana, lo cual es sumamente importante al momento de promover marcas nacionales. Alexis, por otro lado, ha logrado ser más empático con aquellos colegas que trabajan en lugares similares, pues ya comprende lo que es vivir una experiencia laboral de ese estilo.
Por estas cosas, Colectivo Mercantil, ¡eres el indicado para Cachivache!, pues tu emprendimiento y ganas de ayudar a otras marcas mexicanas nos parecen inspiradoras.
Amigos lectores, no se pierdan la oportunidad de visitar este espacio y conocer las diferentes marcas que forman parte de la familia de Colectivo Mercantil.
